CORRECCIÓN DE “PAPADA” O GRASA SUBMENTONIANA

La presencia de grasa submentoniana no deseada y la convexidad asociada de esta zona, pueden afectar al aspecto joven de la misma, incidiendo negativamente, tanto en la autoestima como en las opiniones de los demás, respecto al atractivo de la persona.

Existe una percepción equivocada de que la papada sólo aparece en personas mayores y con sobrepeso, cuando en realidad, puede ocurrir también a cualquier edad.

El envejecimiento, la obesidad, el sobrepeso, los factores genéticos, el adelgazamiento y la pérdida de elasticidad de la piel de la cara y el cuello, son factores  predisponentes para la formación de esta condición, en muchos casos, resistente a dieta y ejercicio.

Hasta ahora, las posibilidades de tratamiento de la grasa submentoniana, comúnmente llamada papada, se limitaban a opciones quirúrgicas como la liposucción.

 Para el tratamiento no quirúrgico de esta zona disponemos de opciones según la patología predominante sea el tejido graso o el descolgamiento de la piel.:

-Tratamientos para reducir el tejido graso

-Tratamientos para tensar la zona con piel redundante, con hilos tensores reabsorbibles

Actualmente disponemos de procedimientos no invasivos para el tratamiento del tejido graso acumulado en la papada con productos inyectables, que provocan su eliminación a nivel local.

La técnica consiste en una serie de microinyecciones en la grasa submentoniana realizadas con una aguja fina.

El número de sesiones depende de cada paciente, pero por lo general, varía entre 2 y 4 sesiones y el intervalo entre sesiones es de 2-4 semanas. Los resultados comienzan a notarse tras la segunda sesión.

En general, los mejores candidatos son mujeres y hombres entre 20 y 65 años, con grasa submentoniana de grado leve a moderado.

Para las personas que presentan un grado considerable de flaccidez y adiposidad localizada, es preciso recurrir al tratamiento quirúrgico.